Un hombre ya maduro contrató una secretaria.
Era una mujer joven, ingeniosa, gentil y, sobre todo, muy hermosa.
Un día, mientras tomaba dictado, notó que su jefe tenía la bragueta abierta.
Terminó el dictado y se dispuso a salir de la oficina cuando, antes de
cerrar la puerta, dijo:
'Por cierto, señor, la puerta de su cuartel está abierta.
' El hombre no entendió el comentario; no obstante,
al poco rato se dio cuenta de que el cierre de sus pantalones estaba abajo.
Al hombre le hizo gracia la manera en la que su secretaria se había referido al pequeño incidente y decidió aprovechar la oportunidad para coquetear un poco, por lo que la llamó a su oficina:
'Dígame, señorita, cuando vio que la puerta de mi cuartel estaba abierta,
¿por casualidad no vio también a un soldado en posición de firme?'
'Oh, no, señor!
Lo único que vi fue un veterano de guerra sin fuerzas echado entre dos
viejas mochilas de campaña
BLOG DE ROSAMAR MADRILEÑA, "Comienza tu día con una sonrisa, verás lo divertido que es ir por ahí desentonando con todo el mundo." Mafalda (Quino
Translate this blog
Buscar en este blog
lunes, 22 de marzo de 2010
SECRETARIA
Etiquetas:
CHISTES CORTOS,
HOMBRES,
Secretarias
CONSULTA GINECOLOGO
Un ginecólogo aguarda su última paciente que no llega.
Después de 45 min., suponiendo que no vendrá resuelve tomarse un gin tonic para relajarse antes de volver a su casa.
Se instala confortablemente en un sillón, comienza a leer el periódico cuando llaman a la puerta.
Es su paciente que llega apurada y pide disculpas por el retraso:
- No tiene importancia, responde el medico. Estaba tomando un gin tonic esperando para irme a casa, ¿quiere uno para relajarse?
- Acepto con placer... - responde la paciente aliviada.
El le sirve una copa y se sienta frente a ella para conversar. De repente se escucha una llave dentro de la puerta del consultorio.
El médico sobresaltado se levanta y dice:
- ¡¡¡Mi mujer!!!... rápido quítese la ropa y abra las piernas...
Después de 45 min., suponiendo que no vendrá resuelve tomarse un gin tonic para relajarse antes de volver a su casa.
Se instala confortablemente en un sillón, comienza a leer el periódico cuando llaman a la puerta.
Es su paciente que llega apurada y pide disculpas por el retraso:
- No tiene importancia, responde el medico. Estaba tomando un gin tonic esperando para irme a casa, ¿quiere uno para relajarse?
- Acepto con placer... - responde la paciente aliviada.
El le sirve una copa y se sienta frente a ella para conversar. De repente se escucha una llave dentro de la puerta del consultorio.
El médico sobresaltado se levanta y dice:
- ¡¡¡Mi mujer!!!... rápido quítese la ropa y abra las piernas...
Etiquetas:
Médicos
VIVIR O MORIR
Anoche mi mamá y Yo estábamos sentados en la sala hablando de las muchascosas de la vida... entre otras... estábamos hablando de la idea de vivir
o morir.
Le dije: 'Nunca me dejes vivir en estado vegetativo, dependiendo de
máquinas y líquidos de una botella. Si me ves en ese estado, desenchufa
los artefactos que me mantienen vivo, prefiero morir.
Entonces, mi mamá se levantó con una cara de admiración...
Y me desenchufó el televisor, la computadora,el DVD, el internet, el ipod, el Xbox, el móvil y me TIRÓ todas las cervezas!!
Japuta...CASI ME MUERO!!!
o morir.
Le dije: 'Nunca me dejes vivir en estado vegetativo, dependiendo de
máquinas y líquidos de una botella. Si me ves en ese estado, desenchufa
los artefactos que me mantienen vivo, prefiero morir.
Entonces, mi mamá se levantó con una cara de admiración...
Y me desenchufó el televisor, la computadora,el DVD, el internet, el ipod, el Xbox, el móvil y me TIRÓ todas las cervezas!!
Japuta...CASI ME MUERO!!!
Etiquetas:
CHISTES CORTOS,
FAMILIAS
MADRILEÑO EN BARCELONA
> Un madrileño en Barcelona entra en un bar y pide una caña en castellano.
> El camarero se la pone y le dice:
> -Són noranta-cinc cèntims
> El madrileño deja sobre la barra noventa céntimos y sigue tomándose la
> caña tranquilamente.
> A lo que el camarero le dice:
> - Escolti falten cinc cèntims
> Y el madrileño ni puto caso, como quien oye llover. A lo que el camarero
> ya rebotado le suelta:
> - Escolti que em deu cinc cèntims; no em faci muntar un nombre... M'està
> escoltant perfectament.
> Y el madrileño a lo suyo, tomándose la birrita, como si estuviese sólo en
> el local.
> Por fin el camarero, rojo de ira, y escupiendo las palabras dice:
> - Oiga desgraciado. Me está oyendo y entendiendo perfectamente, págueme
> los cinco céntimos que me debe.
> A lo que el madrileño sonriendo y echando mano al bolsillo para pagarle
> contesta:
> - Ya sabía yo, cabrón, que por cinco céntimos acababas hablando
> castellano
> El camarero se la pone y le dice:
> -Són noranta-cinc cèntims
> El madrileño deja sobre la barra noventa céntimos y sigue tomándose la
> caña tranquilamente.
> A lo que el camarero le dice:
> - Escolti falten cinc cèntims
> Y el madrileño ni puto caso, como quien oye llover. A lo que el camarero
> ya rebotado le suelta:
> - Escolti que em deu cinc cèntims; no em faci muntar un nombre... M'està
> escoltant perfectament.
> Y el madrileño a lo suyo, tomándose la birrita, como si estuviese sólo en
> el local.
> Por fin el camarero, rojo de ira, y escupiendo las palabras dice:
> - Oiga desgraciado. Me está oyendo y entendiendo perfectamente, págueme
> los cinco céntimos que me debe.
> A lo que el madrileño sonriendo y echando mano al bolsillo para pagarle
> contesta:
> - Ya sabía yo, cabrón, que por cinco céntimos acababas hablando
> castellano
Etiquetas:
Catalanes
Suscribirse a:
Entradas (Atom)