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domingo, 4 de abril de 2010

Las ovejas‏

Era un pastor que tenía un rebaño de ovejas, pero no tenía un

macho para 'cubrirlas'.

Le comenta su problema a un colega y éste le dice:

- No pasa nada, llévatelas al monte y las cubres tú mismo, si al

día siguiente se ponen al sol es que están preñadas y se ponen

a la sombra vuelves a intentarlo.

El pastor sube a las ovejas a la furgoneta, se las lleva al monte y... dacha!!!

A la mañana siguiente se despierta y pregunta a su mujer:

- Marusiña, ¿las ovejas están al sol o a la sombra?

- Están a la sombra - contesta la mujer.

El pastor vuelve a subir a las ovejas a la furgoneta y repite

la operación.

A la mañana siguiente:

- Marusiña, ¿las ovejas están al sol o a la sombra?

- Están a la sombra - contesta la mujer.

El pastor vuelve a cargar sus ovejas en la furgoneta, y así

sucesivamente durante varios días, hasta que una mañana:

- Marusiña, ¿las ovejas están al sol o a la sombra?

- Pues la verdad, ni al sol ni a la sombra, desde las 6 de la

mañana están todas subidas en la furgoneta tocando el claxon.

Niño pobre, pobre niño‏

Llega un niño a la escuela con un ojo morado y la maestra
le pregunta

- ¿Dime Alberto que te ha pasado?

Y el niño responde:

- Es que en mi casa somos tan pobres que dormimos en la
misma cama mis
padres, mi hermano y yo. Anoche mi papi se subió encima
de mi mami y
decía: 'ah... aaah... aaaah...', hasta que se giró hacia
mi y me preguntó:

'Hijo... ¿estás dormido?'.

Y yo le dije: 'no papi' y...

¡Guaka!, me soltó un guantazo.

La maestra le aconsejó:

- Esta noche si te preguntan procura quédarte callado...

Al día siguiente llega con el otro ojo morado y la
maestra le pregunta:

- ¿Qué te pasó esta vez? ¿No te quedaste callado?

- Es que esta noche mi papi tambien se subió encima de mi
mami y decía:
'ah... aaah... aaaah...' Y yo calladito, maestra'. Y mi
padre Más rápido: 'ah... aaah... aaaah... aaaaah...
aaaaaah'. Y yo calladito, calladito, hasta que mi papi
empezó a decir: '¡Me voy a correr, me voy a
correeer!'. Y mi mamá contestó: '¡Yo tambiééén!'.

Y yo como tenía miedo de que no me llevaran les dije:

'¿Y yo con quién me quedo?'.

Y claro... ¡¡Guaka!!

- Bueno, cuando tu papi le diga eso a tu mami quédate
callado.

Al día siguiente llega el niño más golpeado todavía y le
cuenta a la maestra:

- Otra noche más mi papi encima de mami y yo calladito. Y
mi papi decía:
'ah... aaah... aaaah...'. Pero yo calladito calladito. Y
mi papi dijo de nuevo: '¡Me voy a correr, me voy a
correeer!', y yo calladito calladito...
Entonces, la cama se empezó a mover muy fuerte y mi
hermano empezó a rebotar hasta que se cayó de la cama
rompiéndose la crisma del hostiazo y yo mudo...

Entonces mi papi le dijo a mi mami:

'Que... ¿echamos otro?'. Y yo intervine:

'No papi, que ya me bajo yo solito'

y...¡¡¡Guaka!

EL BORRACHITO

Iba un borrachito a una cantina. Al entrar le dice al cantinero:
Deme una botella para mí, una para usted, y otra para todos los que estén aquí.
El cantinero se las da, y al terminar le pide la cuenta, el borracho contesta:
Ahorita no traigo dinero.
Por lo que lo saca a golpes. Al día siguiente vuelve a ir y dice:
Dame una botella para mí, una para usted, y otra para todos los que estén aquí.
El cantinero se las da, y al terminar le pide la cuenta, el cantinero le cobra la cuenta y el borrachito contesta:
Se me olvidó traer el dinero.
Por lo que otra vez el cantinero la saca a patadas.
Al tercer día el borrachito vuelve a la cantina y le pide al cantinero:
Dame una botella para mí, y otra para todos los que estén aquí.
El cantinero le pregunta:
¿Y a mí por qué no me mencionó?
Porque usted es bien violento cuando toma.

MAGIA

Un mago subió a un microbús que iba llenísimo a la hora del almuerzo y quiso entretener a la gente con sus trucos.
Señoras y señores- gritaba- muy buenas tardes.

Nadie le hacía caso, a pesar que el pobre hombre había sacado de la nada un ramo de flores.
Enfadado porque nadie le hacía caso, les anunció:
Voy a hacer que se eleve este autobús... ¡1, 2, 3!
Y entonces el microbús se elevó. Toda la gente, asustada, le gritaba:
- ¡¡¡Bájalo, bájalo, por favor!!!
- Ahhhh, no creían que hacía magia, ¿eh? Si quieren que baje el microbús, soplen todos.
Toda la gente empezó a soplar y el autobús empezó a bajar. La gente estaba emocionada y entonces le pidieron otro truco al mago, éste les dijo:
- Voy a hacer que a ese viejito que está al fondo con su esposa, se le ponga tieso "el... pájaro": ¡1, 2, 3!
¡¡¡¡¡ZASSSSSSS!!!!!, se le puso tiesa al viejito y los pasajeros, al unísono:
¡¡¡¡¡¡¡OHHHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!.

Entonces la viejita saca una pistola y grita:
¡¡¡AL PRIMERO QUE SOPLE, LO MATO!